El cannabis, conocido por su derivado más común, el tetrahidrocannabinol (THC), puede ser consumido de varias maneras, incluyendo fumar polen, aceite, resina u hojas secas, e incluso ingerido. Esta sustancia tiene un potencial significativo de adicción.
El consumo prolongado de cannabis puede llevar a una serie de efectos, tanto físicos como psicológicos, tales como:
El uso continuo del cannabis puede afectar negativamente el cerebro y el cuerpo, causando:
Los síntomas físicos pueden incluir:
En Clínica Versátil, ofrecemos un enfoque personalizado para el tratamiento de la adicción al cannabis. Nos especializamos en desarrollar planes de tratamiento que se ajusten a las necesidades individuales de cada paciente, trabajando estrechamente con sus familias para asegurar una recuperación integral.
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